viernes, 30 de abril de 2010

El movimiento de Independencia de la Nueva España (1810-1821)

Causas internas de la Independencia

Una de las causas principales fue que los españoles peninsulares, mantuvieron un control absoluto de las actividades económicas del país como la minería, la industria y el comercio. Dejando sólo actividades secundarias a criollos y mestizos.

Otra causa fue que los españoles peninsulares arrebataron a los pueblos indios de las fuentes de ingresos como el producto de sus tierras. Además, los peninsulares mantuvieron sobre la política novohispana, un severo monopolio que les permitió acaparar los rasgos públicos de mayor importancia, dejando sólo puestos inferiores de la burocracia nacional a los criollos.

Por último, las marcadas diferencias sociales en la Nueva España, fueron antecedentes de la independencia, ya que eran despreciados los indios y las castas con extrema dureza, de igual manera a los criollos se les regateaba posición social. Lo anterior provocó profundos rencores y actitudes revanchistas en contra de los peninsulares.

Causas externas de la Independencia

Una de las principales causas fue la influencia de la Ilustración y de las ideas revolucionarias. Esto llegó a México a través de los jesuitas y alcanzó su apogeo en 1770, con la participación de Benito Díaz de Gamarra. La difusión de ideas revolucionarias se dio en libros, folletos y circulares en forma clandestina. Estas ideas se bastaron en las doctrinas de Rousseau, Montesuieu, Voltaires, D'Alembert y algunos otros.

Por otro lado, también influye la invasión de las tropas napoleónicas a España, en 1808 y la sustitución de Carlo IV por José Bonaparte. Lo que provocó en el imperio colonial español, una profunda crisis política.

Por último, la independencia de los Estados Unidos en 1776, influyó seriamente con sus ideas y principios a los sectores ilustrados de hispanoamérica.

Antecedentes de la Independencia

La Revolución de Independencia comienza con los conspiradores de Valladolid en 1809. Participaron en ella Mariano Michelena, José María Obeso, Manuel Ruíz de Chávez, Vicente de Santa María y otros nobles personajes de la ciudad. El plan consistió en preservar el reino de Fernando VII y convocar a un congreso que gobernara el país. El movimiento fue descubierto y los cabecillas fueron sometidos a juicio; se le liberó por órdenes del virrey Francisco Javier Lizana en julio de 1809.

De la misma forma, el capitán Ignacio Allende, trasladó la conspiración a San Miguel el Grande y a Querétaro. Hubo reuniones en la que se planteaba la necesidad de la independencia. Finalmente fue en Querétaro donde tomó forma.

En los primeros meses de 1810 se organizó en Querétaro "La Academia Literaria", donde se realizaban juntas conspiratorias, a las que asistía gente como los hermanos Epigmenio y Emeterio González, los hombres de leyes Parra, Lazo y Altamirano; los militares Arias, Ignacio Allende, Juan Aldama, el corregidor Miguel Domínguez y su esposa Josefa Ortíz; los curas José María Sánchez y Miguel Hidalgo. El plan consistía en aprehender a los españoles (el 1° de octubre de 1810), de las poblaciones más importantes y después reunirse con los jefes insurgentes, para decidir el tipo de gobierno más conveniente en el país.

Etapas del movimeinto

Iniciación: Corresponde del 16 de septiembre de 1810 al 21 de marzo de 1811; la figura central fue Miguel Hidalgo y Costilla. En los primeros días del mes de septiembre de 1810, se descubre la conspiración que se estaba fraguando, por lo que el intendente de Guanajuato, José Antonio de Riaño, ordenó llevar a cabo las detenciones de los conspiradores. Josefa Ortiz de Dominguez comunica el descubrimiento de la orden de detención, a Aldama y Allende; por lo que decidieron marchar a la ciudad de Dolores el 15 de septiembre de 1810 para avisarle a Hidalgo. Una vez reunidos, decidieron lanzarse a la insurrección. El 16 de septiembre de 1810, en la Parroquia de Dolores (intendencia de Guanajuato). Don Miguel Hidalgo se dirige a los feligreses para invitarlos a rebelarse en contra de los españoles, acusándolos de pretender entregar el reino a los franceses y de atentar contra la religión.

Este grupo insurgente marchó a Guanajuato, donde encontró resistencia realista en la Alhóndiga de Granaditas. Esta resistencia, estaba encabezada por el intendente Riaño, la cual fue suprimida. Una vez en la ciudad, los insurgentes saquearon las casas y las tiendas españolas. De ahí marcharon a la ciudad de Valladolid, tomándola son resistencia, y siugieron por Maravatío, Tepetongo e Ixtlahuaca, hasta llegar a Toluca.

Los insurgentes siguieron su marcha, hasta la ciudad de México. En tanto, el virrey Venegas enviaba un ejército, comandado por Torcuato Trujillo, para hacerles frente, pero éste fue derrotado en el Monte de las Cruces. En estas fechas, Hidalgo tiene una entrevista con Morelos, en donde le encomendaba la insurrección del suroeste del país.

En una contraofensiva los ejércitos realistas, bajo el mando de Calleja, vencen a los ejércitos de Hidalgo, conformados básicamente por campesinos desorganizados y desarmados, perdiendo la ciudad de Guanajuato. Esta derrota hace que los insurgentes se replieguen hasta las cercanías de Guadalajara en lugar llamado Puente de Calderón. El 17 de enero de 1811 los insurgentes nuevamente son derrotados y huyen hacia el norte, en un intento de reorganizar su ejército. En el camino de Monclova los insurgentes son traicionados por el coronel Ignacio Elizondo, siendo aprendidos dirigentes como Hidalgo, Allende, Aldama, Abasolo y Jiménez, quienes son juzgados y fusilados en Chihuahua.

Pensamiento político y social de Miguel Hidalgo

  • Establecer un Congreso compuesto de representantes de todas las ciudades, villas y lugares de este reino.
  • Dictar leyes benéficas, de acuerdo a las circunstancias de cada pueblo.
  • Desterrar la pobreza, fomentar la educación y las artes.
  • Abolir la esclavitud y extinguir el tributo que pagaban las castas y los indios.
  • Suprimir los estancos del tabaco y vino, al mismo tiempo, reducir los impuestos al comercio.
  • El goce de las tierras de las comunidades indias por los mismos sin la intervención de extraños.
  • Durante este periodo se publicó el primer periódico insurgente "El Despertador Americano".
Organización: Destacan en esta etapa Ignacio López Rayón y José María Morelos y Pavón. Su ejércitos tenían la peculiaridad de ser diestros, armados y con una mínima instrucción militar. Los conducían los más capaces, entre ellos Vicente Guerrero, Mariano Matamoros, Valerio Trujano, Guadalupe Victoria, los hermanos Galeana y los hermanos Bravo. El ejército realista estaba comandado por el virrey Don Félix Ma. Calleja, quien fue el más duro enemigo de la insurgencia a la que prácticamente desarticuló.

Tras la muerte de los jefes del movimiento insurgente, el licenciado Ignacio López Rayón se hizo cargo del movimiento temporalmente, decidiendo crear una junta de gobierno con el propósito de organizar un mando central que reuniera a las fuerzas rebeldes. Crearon así, en Zitácuaro, Michoacán, la Suprema Junta de Gubernativa de América, en cabezada por López Rayón ala que se integró José María Liceaga y José María Morelos y Pavón. La junta quería servir de elemento de unión y coordinación entre los grupos de insurgentes, aunque esto nunca se logró nunca, ya que hubo ciertas pugnas entre los mismo componentes.

Los pensamientos políticos y sociales apuntaban a lo siguiente: Se debe mantener la religión católica, la soberanía debe residir en la masa de la nación, España y América serán integrantes de la monarquía, sujetas al rey Fernando VII, pero iguales entre sí; y proponía la división del gobierno en tres poderes, congreso de representantes, disposición de libertad de comercio y la entrada a extranjeros.

Rayón trató de dar al movimiento y al país, una dirección, además, la posibilidad de auxilio y reconocimiento del exterior, como también ligar al movimiento, importantes personajes que vivían en las grandes capitales.

José María Morelos, el caudillo del sur aceptó casi todo lo que venía del proyecto de Rayón, pero rechazó lo referente a Fernando VII. A Raíz de la captura del Puerto de Acapulco, Morelos suspendió su actividad militar, para destinar integramente sus esfuerzo a la acción política y a intentar la organización del país. En el Congreso de Chilpancingo celebrado el 14 de septiembre de 1813, Morelos da lectura a su documento "Sentimientos de la Nación", en el que planteaba lo siguiente: la absoluta independencia de la nación; el reconocimiento de la soberanía popolar y la organización de un gobierno distribuido en tres poderes: ejecutivo, legislativo y judicial; los puestos públicos debían ser ocupados por los nacionales; la esclavitud y la distinción de castas, deben desaparecer; exigir el respeto y las garantías para la propiedad y el domicilio, el establecimiento de la religión católica como única, ofrecerle mejor salarios al jornalero y alejarlo de la ignorancia.

Después de varias penalidades, el 22 de octubre de 1814, se promulgó en Apatzingán el "decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana"; o sea, la Constitución de Apatzingán, donde se recogen los principios revolucionarios.

Por otro lado, en esta etapa, los insurgentes obtuvieron valiosas victorias ene l centro y sureste del país, entre 1811 y 1814. Aunque, Calleja como virrey, recibió nuevas tropas realistas y atacó la ciudad de Valladolid, la cual era defendida por los insurgentes (al mando de los capitanes Metamoros y Galeana), quienes sucumbieron en la batalla. La derrota de los insurgentes provocó la pérdida de la artillería y numerosas vidas, disensión entre los principales caudillos y la dispersión del ejército. Morelos cayó preso en Temascala, en donde fue conducido a la Ciudad de México. Fue juzgado por dos procesos, uno eclesiástico y otro como rebelde del rey. Morelos fue encontrado culpable, por lo que fue degradado y después fusilado, el 22 de diciembre de 1815, en San Cristobal Ecatepec.

Resistencia: Abarca los años de 1815 a 1820, época difícil para los grupos insurgentes, que se ven obligados a refugiarse en la sierra y en algunos fuertes, para mantener vivo el espíritu libertario. En este periodo destaca Francisco Javier Mina y Vicente Guerrero.

El 15 de abril de 1817, apareció en Soto de Marina (Tamaulipas), Francisco Javier Mina; guerrillero español con ideas liberales; se distinguió por su valentía y patriotismo, peleó contra los franceses en España. Convencido por Fray Servando Teresa de Mier, vino a la Nueva España, para participar en el movimiento contra la monarquía absoluta de Fernando VII. Realizó una campaña de corta duración, pues en poco tiempo, pues en poco tiempo, Mina fue derrotado en la Hacienda del Venadito. Fue hecho prisionero y fusilado el 11 de noviembre de 1818.
A mediados de 1818, la única resistencia contra las fuerzas de gobierno virreinal, corría a cargo de Vicente Guerrero; quien dirigía unas tropas acantonadas en la región del río Balsas. Logró apoderarse de Chilapa y de Tierra Caliente (actual estado de Guerrero). Su ideal fue un gobierno civil,y no militar.

En el año de 1819, el gobierno de Fernando VII, sufre un crisis política y social en España. Los liberales españoles venían conspirando contra el absolutismo, pero no habían podido hacer una concertación para levantarse contra el régimen. La oportunidad se presentó el 1° de enero de 1820, cuando las tropas españoles a punto de embarcarse con rumbo a América, al mando del general Rafael de Riego se pronunció en contra de la monarquía absolutista para reclamar un gobierno constitucional, que ofreciera y respetara las garantías de los individuos, y modificara las penosas condiciones a las que estaba sujeto el estado español. Con la victoria de los revolucionarios, el Rey Fernando VII se vio obligado a restablecer la constitución de Cadiz y la representación de diputados de las colonias en las cortes españolas. Además estableció numerosas reformas, como la abolición de la inquisición y del fuero eclesiástico, la reducción del diezmo a la mitad y la venta de bienes eclesiásticos. La noticia de este cambio causó inquietud en la Nueva España, sobre todo, entre el grupo de españoles y la aristocracia criolla.

Consumación: Comprende los años de 1820 y 1821. Las reformas anteriores tuvieron repercusión en la Nueva España, por lo que el virrey tuvo necesidad de elevar los impuestos para mantener su ejército, lo cual provocó descontento en las altas esferas de la sociedad, que vieron amenazados su bienes y privilegios. La restauración del régimen constitucional era particularmente grave para la Iglesia. Los funcionarios peninsulares, el clero y los miembros dela alta sociedad novohispana, decidieron desconocer la constitución y llevaron a cabo juntas clandestinas en el templo de la Profesa en la Ciudad de México. Éstas fueron encabezadas por Matías Monteagudo, rector de la Universidad de México y antiguo inquisidor. El objetivo de este grupo, fue realizar un golpe sorpresivo para restablecer el anterior régimen de Estado. Por todas partes se hacían las juntas clandestinas, generalizando entre los peninsulares y criollos la idea de proclamar la independencia.

Las ideas de independencia, formaron el Plan de la Profesa. Los jurados decidieron en que el jefe que llevaría adelante sus propósitos era el coronel Agustín de Iturbide, hombre valiente que siempre tuvo éxito en la guerra contra los insurgentes.

El primer paso de Iturbide era suprimir por completo movimiento insurgente, pero en vista de que Vicente Guerrero y sus hombres mantenían viva la lucha, e incluso derrotaron algunas fuerzas realistas; Iturbide cambió sus propósitos y optó por entrar en tratos. Iturbide y Guerrero llegaron a un entendimiento, en el cual Iturbide, el nuevo "libertador", dio a conocer en iguala, el plan por el cual se proclamaba la independencia (24 de febrero 1821). El Plan de Iguala tuvo tres objetivos o garantías:
  • La unidad religiosa con base en el catolicismo como única religión.
  • La independencia completa con respecto a España.
  • La unión de todos los habitantes, sin distinción de razas.
Los dos ejércitos, antes rivales, se unieron bajo una sola bandera de tres colores diagonales (blanco, rojo y verde), a la que llamaron "trigarante" (porque representaba las tres garantías: religión, unión e independencia).

El virrey, Don Juan O'Donojú, último gobernante de la Nueva España, era un liberal de ideas avanzadas y anticolonialistas, por lo que decidió negociar con Iturbide en Córdova, Veracruz, el 24 de agosto de 1821. De la negociación saldrían los Tratádos de Córdoba, en donde se reconocía la independencia de México. El 27 de septiembre de 1821, el ejército trigarante entra a la Ciudad de México, consumándose así la independencia.


8 comentarios:

  1. EXCELENTE TRABAJO ....ME AYUDO CON MI PROYECTO....GENIAL¡¡¡

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  2. fantástico, me ayudo demasiado, fuiste muy subjetivo lo que pocos.

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  3. me ayudo mucho, pero una pregunta, ¿Cuáles eran los principales insurgentes?

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  4. me ayudo en historia casi me reprueban

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  5. shaa qué hubiera pasado si no hubiera existido un virrey anticolonialista?, nos hubieran segudo puteando, mate y mate insurgentes?, ya se porqué la independencia no se celebra el 27 de septiembre. auch

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